¿Indecisa si apuntarte a yoga u otra disciplina? Desde Idawen te queremos explicar 6 posturas de yoga iniciales, con las que notarás resultados en poco tiempo y sin necesidad de ser una total yogui. Lo que hay que tener claro es, que en esta disciplina no se trata de imitar las asanas. Si no de ir poco a poco, centrándote en los puntos claves de tu cuerpo que estipula el yoga. Para así poco a poco, ir corrigiendo la postura, y llegar a completar las asanas correctamente. pero no os asustéis, para conseguirlo, se necesita tiempo y dedicación. En este proceso buscarás conseguir el equilibrio, concentración y una correcta respiración. Esto contribuye a una estabilidad tanto física como mental. Se trata de movimientos sencillos, pero que requieren mucha concentración. Te sorprenderán los beneficios que te aportará esta disciplina tan solo realizando las diferentes posturas de yoga.
Posturas de yoga: Balasana o postura del niño.
Esta postura es una de las más sencillas y es ideal para soltar tensiones y relajar todos los músculos de la espalda. Para conseguirlo colócate de rodillas y siéntate sobre los talones, los brazos deben estar hacia atrás y con las palmas de las manos mirando hacia arriba. Recuerda inhalar y exhalar por la nariz, coloca los brazos hacia delante con las palmas de la mano apoyadas en la esterilla. Esta postura, está muy extendida hoy en día y practicada como uno de los estiramientos más usados post-ejercicios. Ya que permite estirar gran parte delos músculos de la espalda.
Postura de yoga: Gato-Vaca.
Para realizar esta asana tienes que ponerte en cuadrupedia. Inhala y deja que la respiración te guíe en cada movimiento.
Para el gato arquea la espalda y agacha la cabeza al mismo tiempo que encoges el abdomen. Por lo contrario para la vaca hay que elevar la pelvis y la cabeza hacia arriba y abrir el pecho. Esta postura te ayuda a fortalecer y tonificar el abdomen ya que la respiración en ambas posturas, está concentrada en el abdomen.
Perro mirando abajo.
Para realizar esta postura de yoga hay que colocar las manos y los pies en el suelo como haciendo una V invertida. Sin mover las manos hay que empujar los glúteos hacia arriba, mantener la posición y respirar. Esta postura nos ayuda a estirar los músculos del cuerpo como son las piernas, espalda y brazos reduciendo así los dolores de espalda.
Postura de yoga: Luna creciente.
Consiste en arquear la columna junto con los brazos y estirar la parte trasera de la pierna. Nos recuerda a la luna por eso recibe ese nombre. Esta postura de yoga nos ayuda a fortalecer las piernas y también ayuda a regular el sistema digestivo porque ayuda a bajar el nivel de cortisol (hormona relaciona con el estrés). Hay que tener especial cuidado es esta postura para no sobrecargar la pierna delantera, repartiendo el peso en partes iguales.
Postura de yoga: La montaña.
Coloca los pies juntos y los brazos relajados a ambos lados del cuerpo. Reparte el peso uniforme, en ambos pies después levanta los brazos con los dedos entrelazados y las palmas de la mano mirando hacia arriba, inhala aire. Un punto importante es no arquear la espalda y mantener siempre la alineación del cuerpo. Esta postura previene la ciática, favorece la alineación de la columna y mejora el tono muscular en general.
Postura de yoga: El guerrero.
Según la mitología Indú esta postura le sirvió a Shiva para matar a Daksha y vengarse de la muerte de su amada. Partiendo de la postura anterior de la montaña que estábamos completamente erguidos. Se coge aire y se separan los pies el de atrás haciendo un ángulo de 45 grados. Esta postura sirve para estirar el tronco superior, fortalece las piernas y ayuda a tener más resistencia.
¿Cuales son tus posturas de yoga preferidas? En Idawen te recomendamos realizar esta actividad bajo la supervision de un profesional.